Es interesante el punto de vista. Ayer mismo volví a ver la película (una de esas películas que por su estructura y su temática uno puede no cansarse jamás de ver... los hermanos Nolan vienen teniendo una carrera intachable cuando se juntan a escribir) en Blu-ray. Por el simple hecho de que no puedo obviar los detalles técnicos, es increíble la postproducción que tiene. Los colores son vivísimos y la definición de la imagen es inmejorable.
Pero avocándonos de lleno al problema que nos ocupaba, me llamó mucho la atención la composición entera de la película. No es sólo la temática que trata, sino los recursos que se utilizan para dar forma a esa temática. La película entera está compuesta, como bien dice Julio, sobre un binarismo (o varios binarismos, a decir verdad), y a lo largo de toda la historia se presentan siempre problemas éticos binarios: dos delincuentes a quienes se les da un palo de pool para ver quién sobrevive, dos barcos con un detonador cada uno para ver quién vuela primero al otro, etc., etc. Lo interesante es cómo usan ese binarismo. En los personajes, los polos binarios están expresados en tres personajes, uno de los cuales expresa con toda claridad la perspectiva del director: Batman, el Guasón y Harvey Dos Caras. Si se tratara de una cuestión de lucha entre el Bien y el Mal en busca de un equilibrio, entonces ciertas actitudes como la del Guasón o la de Harvey serían inexplicables. Harvey no encuentra matices: es o completamente bueno, o completamente malo. Es una suerte de expresión del espíritu humano dividido entre el caos y el cosmos. Si se tratara de una cuestión de equilibrio, el Guasón querría en serio destruir a Batman o Batman dejaría caer al Guasón en la última escena.
Como le dice el Guasón a Harvey en el hospital, su función no es hacer planes. Eso lo deja a los "schemers" (hay un dejo de heggelianismo en esa afirmación... un dejo muuuy grande!). Su función es mostrarles a los schemers que sus planes no sirven para nada. Es un deconstructor, nada más que no deconstruye para construir. Destruye porque sí.
Ahora, esa pelea binaria puede conducir a dos situaciones: el triunfo de una de las partes, lo cual podría representar un "paraíso" para la parte ganadora, o la situación tal cual es, es decir, el conflicto no se resuelve porque el conflicto es la moral de la sociedad. La primera es la solución marxista, la segunda es la maquiavélica. Desde la segunda perspectiva, puesta en la película en boca del Guasón, la finalización del conflicto sería el fin de la vida de la sociedad. Lo que diferencia a Batman del Guasón es que el primero busca la construcción de algo, mientras el segundo, como decíamos, destruye sin propósito. Es como si la fuerza creadora de Ciudad Gótica se pusiera de manifiesto en una expresión binaria.
PD: El binarismo llega a extremos microscópicos. Dos diferentes personajes repiten dos frases diferentes en dos momentos distintos de la película. Es un pequeño guiño de los autores, supongo!