En muchos sitios, veo que se escribe el nombre de enfermedades con mayúscula cuando estos, en verdad, deben escribirse con minúscula.
Algunos ejemplos son: sarampión, gripe.
Lo mismo se aplica para los nombres propios que designan nombres comunes: alzhéimer, parkinson, chagas, etc.
Sin embargo, el nombre propio mantiene la mayúscula en estos casos: enfermedad de Alzheimer, mal de Chagas, etc.
Fuente: Ortografa- RAE 2010-Uso de las maysculas